APRENDIENDO A VER LA EMPRESA COMO UN TODO,
UNA LECCIÓN PARA APRENDER A GESTIONAR LA CRISIS
Las empresas, deben aprender a convertirse en agentes de sus propios cambios y la visión sistémica es una de las principales herramientas para lograrlo.
Quiero referirme, para iniciar el tema, a una expresiva metáfora que leí en el libro "El camino del Sufi" del autor Idries Shah de Editorial Paidos, segunda edición, 1978 Buenos Aires Argentina.
Le preguntaron a Shibli, quién te guió por el camino? contestó: un perro.
Una vez, lo encontré medio muerto de sed a la orrilla de un rio. Cada vez que veía su imagen, reflejada en el agua, se asustaba y se alejaba corriendo, creyendo que era otro perro.
Finalmente, fue tal, su necesidad por la sed que tenía, que venciendo su miedo se arrojó al agua y de inmediato, la imagen del "otro perro" desapareció. El perro descubrió que el obstáculo para satisfacer su sed, era él mismo y que la barrera que le impedía llegar a donde quería, había desaparecido.
Una situación bastante frecuente cuando me encuentro en mis consultorías, es notar el tremendo miedo de los empresarios a cambiar de esquemas, el terror que sienten cuando se le sugiere cambiar paradigmas, corregir prácticas administrativas obsoletas o la desazón que presentan cuando los invitamos a encontrar nuevos caminos, que les permita llegar a ese lugar en el que desean estar y que han buscado por años.
He encontrado además, que una tendencia muy común del empresario, es influir al consultor para que este, haga lo mismo que él venía haciendo y lo avale de alguna forma para que surta el efecto que él no ha podido conseguir.
La reflexión sería, cada que tenemos sed nos asomamos al rio y huimos ante la imagen que vemos?, porqué no lanzarnos al rio para descubrir que el problema somos nosotros mismos y comenzar a plicar nuevas alternativas que oxigenen la empresa?
Suenan vientos de crisis y para grandes males, se deben buscar grandes remedios, son muchas las cosas que debe hacer un empresario, no solo para prepararse para capotearla, sino para llevar la empresa a un buen puerto, donde pueda crecer y desarrollarse de una manera funcional y sostenible en el tiempo.
No todas las empresas perecen en las crisis, porque algunas antes se fortalecen y crecen?
El sufismo es el nombre atribuido a diversos cultos místicos del Islam y para explicar cada tema, se surten de increíbles metáforas, que de manera muy sencilla y deductiva, nos enriquecen con un conocimiento profundo.
Otra de las metáforas Sufi da cuenta de un grupo de ciegos que encontraron un elefante y se lanzaron a sentirlo y palparlo para describirlo:
El primero palpó una de sus piernas y describió su sensación como que se trataba de una columna, el siguiente describe una alfombra larga y rugosa, cuando palpó la oreja del elefante, no!, dice otro de los ciegos, es un ¡gran barril! replicó el que tocó la barriga y el que tocó la trompa, replica entusiasmado, lo tengo!, es un tubo recto y hueco.
De esta sencilla lectura Sufi, podemos determinar que los ciegos jamás tendrán la percepción exacta de los que es un elefante, porque su percepción quedó atrapada en un pequeño segmento del animal y no llegarán nunca a la visión total del elefante. La percepción individual de cada uno es acertada, con una dosis de individualismo sí, debido a su realidad personal, sin embargo, si llegáramos a juntar, las cuatro percepciones, es muy poco probable que llegaramos a la conclusión, de que las descripciones corresponden en su conjunto, a un gran elefante. No es una lástima?
Pues bien, la administración sistémica es una de las grandes posibilidades, para administrar exitosa y productivamente, una empresa, sin embargo, los empresarios PYMES, por lo general, presentan una gran resistencia y un gran temor cuando se les habla del tema.
Son muchas las cosas que quisiera decir, pero voy a escoger los elementos más útiles y representativos, para no hacer muy largo el artículo.
Exite una gran crisis de aprendizaje al interior de las empresas, lo que se traduce en falta de productividad, a su vez la sustentabilidad de la empresa, se ve comprometida.
No existe una apertura sistémica al aprendizaje de nuevas realidades administrativas
La administración sistémica exige aprendizaje personal, pero si los equipos aprenden, éste aprendizaje será tranferido a la organización de una manera viral, lo que es bastante efectivo y alcanza unos mayores efectos, de lo contrario, el conocimiento aislado de personas no es contundente.
Las estrategias más avanzadas de una Gerencia tradicional, no consiguieron , aprovechar las oportunidades que generan las crisis y los cambios.
La fragmentación con la que un Gerente tradicional administra la empresa, no consigue impactar el todo de la empresa y por ello, los pequeños resultados que se puedan conseguir, no resultan la redención de la organización
Una organización que incorpora el aprendizaje como parte de su torrente sanguíneo, es una empresa que se convierte en agente de su propio cambio
Un enfoque sistémico, identifica y comprende de manera profunda y rápida, la arquitectura de las interacciones empresariales, le amplía la visión al Gerente, le aporta información muy valiosa para la toma de decisiones y le genera las más importantes herramientas para transformar el pensamiento y las conductas en las personas y como consecuencia en la organización.
Gerenciar una empresa de manera sistémica, nos debe llevar a encontrar los elementos de naturaleza diversa que se conectan entre sí, en una orgaización, para alimentar y fortalecer dicha interacción y proveerlos con todo lo que necesitan, pero con una visión global.
Un sistema por sí solo, no se explica en la sumatoria o reconocimiento de sus partes, sino en la comprensión de sus interrelaciones, formando una unidad compacta, que trabaja y se apoya de manera conjunta, para alcanzar los objetivos comunes de la empresa
La Administración tradicional por el contrario, busca explicar el todo de la empresa a partir de sus elementos pero de manera aislada y separada, lo que hace que hayan células independientes, que busquen un objetivo que siempre no coincide con el de las empresas. Son empresas cuyas partes desarrollan funciones específicas y si cumplen de manera individual, logran y se reconocen, así la empresa no consiga sus metas. En la visión sistémica, la gente empuja para el mismo lado, no hay logros individuales sino comunes.
Un gran tema, la visión sistémica, complejo, urge su adopción, pero lo que es más importante, que quienes tenemos la misión como externos de trabajar con las organizaciones, nos tomemos en serio este gran reto.